LO QUE SOY

Puedes ver mis manchas en

febrero 09, 2011

MIEDOS

Esa apabullante sensación al estar frente al lienzo en blanco, ese miedo, ese temblor, ese vacío donde nadie esta, donde nada existe, donde contemplo la blancura de el inicio de todo, del primer latido, de la primera mirada, de la primera gota de luz que escurre sobre mi piel, ese miedo, esa apabullante sensación de no existir.

¿Lo viste? ¿Lo viste la primera vez? Cada primer momento frente al lienzo recuerdo esa noche, esa primer noche, querías saber que hacía, querías saber quién soy, o quien era más bien, ahora es lo que era; “quiero verte, déjame verte”, me dijiste mientras acomodaba el caballete y los cuadros para que te sintieras cómoda; “no levantes nada, déjame ver quién eres, déjame ver lo que eres, pinta por favor, pinta algo, déjame verte”.

Esa apabullante sensación al estar frente al lienzo en blanco, ese miedo, ese ser y no ser nada, ser sin saber que serás, me escuchabas recostada en la cama mientras acomodaba un nuevo bastidor sobre el caballete, nunca me gusto que me vieran trabajar, me incomodan las miradas, me dan miedo las expectativas de los demás, me aterran los juicios ante lo que soy sobre un lienzo, ante lo que soy cuando soy la mancha de color que soy, aun así prepare el caballete y los pinceles.

Muchas veces había imaginado que estabas ahí, y pintaba para ti, imaginándote, pensándote, hablándote, y esa noche en que aquello se volvía realidad, tenía miedo, más miedo que el de costumbre, más miedo de ser yo, de ser lo que era y decepcionarte, o aburrirte o que se yo, tenía mucho miedo, como la primera vez que me viste pintar en la clase; te miraba de reojo y tu atenta mirando lo que hacían mis manos, las cosas que acomodaba, los pinceles que limpiaba, el portafolios abierto con los tubos de color despertando perezosos, y dentro de mi cabeza los miedos flotando, el miedo que me da un bastidor en blanco, y el miedo de tenerte ahí frente a mi mirando mis locuras, mirándome como soy, como era.

“¿Qué piensas?” lo que estarás pensando tu, te dije, y ese miedo, ese miedo a ti, y ese apabullante miedo al estar frente a un lienzo en blanco, ese no saber que seré, que soy, que encontrare bajo esa luz blanca, que sonidos romperán el silencio de todos y de todo, que voz susurrara al viento mi nombre, tu voz la reconocí en ese silencio, fue tu risa lo que despertó los colores y la vida y la magia y tantas cosas dentro de mí, esa noche, esa primer noche de sueño tras la puerta, de insomnio venciendo y vencido, de Lunas eclipsando girasoles, de letras despertando, de tu mundo conocido, terminando de morir ante un nuevo mundo que nacía dentro de ti, y en el que yo latía dentro.

Ese miedo, esa apabullante sensación de estar en medio de la nada, salir del capullo de la realidad para reconocer la forma que te envuelve tras la metamorfosis, ¿Qué color soy? ¿Qué trazo tiene mi piel? ¿Qué sombra ha muerto? ¿Fue la mía que se escondió cuando vio que el viento me abrazaba? ¿Qué soy cuando no soy nada? ¿Qué soy en ese génesis que es una noche frente a un lienzo en blanco? Todos mis miedos cuando soy, cuando quiero ser, cuando éxito en ese éxodo hacia la libertad de ser lo que quiera ser, y no ser nada al mismo tiempo, y ser todo; todos mis miedos y esa primer noche, un miedo mas, y tu recostada en la cama escuchándome latir.

Hoy no siento miedo, no siento nada, solo tu muerte me despierta en medio del vacío, solo tu ausencia estrangula el silencio en el que habito, hoy no siento miedo, no siento nada.

Pero dentro aun escucho tu risa, pero dentro aun siento tus miradas, pero dentro aun estoy contigo, y me paro una noche más frente al lienzo en blanco, y de nuevo siento miedo, y de nuevo esa angustia que trae la incertidumbre de no saber qué mundo encontrare tras el telón blanco que cubre el lienzo, y de nuevo soy libre, y de nuevo existo, y de nuevo el viento me viste y soy la nada y soy lo que en el trazo despierta, y de nuevo despierto a tu lado, y de nuevo soy a tu lado y existimos en esta irrealidad que vence el absurdo de tu muerte, y sigues aquí y seguimos vivos, en ese instante que dura un parpadeo frente a un lienzo en blanco.

Esa apabullante sensación al estar frente al lienzo en blanco,

ese miedo,

ese temblor,

ese vacío donde nadie esta,

donde nada existe,

donde contemplo la blancura de el inicio de todo,

del primer latido,

de la primera mirada,

de la primera gota de luz que escurre sobre mi piel,

ese miedo,

esa apabullante sensación de no existir,

pero estas aquí conmigo,

y existimos de nuevo.

2 comentarios:

  1. OJALA Y TODOS TUVIERAMOS LA OPORTUNIDAD D DESPERTAR A DIARIO FRENTE A UN LINZO BLANCO Y SUPRIMIR EL MIEDO D LO Q PUEDA CREAR A LOS DEMAS, SOLO POR EL HECHO D HACI QUERERLO HACER, EL MIEDO UN SENTIMIENTO UN POCO IRRACIONAL O MAS BIEN MUY IRRACIONAL, PERO MIEDO A NO CONOCER LO Q VA A PASAR, MIEDO A NO CUMPLIR CON LAS EXPECTATIVAS D LOS DEMAS, AL FIN Y AL CABO MIEDO, Q NOS PARALIZA Y NO DEJA D ESTAR, SOLO ESTA, Q EN OCASIONES LO DESCONOCIDO PUEDE SER MEJOR, Y YO M INCLUYO EN Q EL MIEDO HA HECHO Q NO CONOSCA MAS COSAS, Q A LO MEJOR PUDIERON SER MEJOR, PERO EL MALDITO MIEDO M PARALIZO SOBRE UN LIENZO BLANCO, Q NUNCA SABRE D Q COLOR PUDO SER PINTADO...


    SOLO S Q HOY VIVO EN UN LIENZO D MUCHOS COLORES, POR Q EN UNA OCASION NO M INTIMIDO, UNO D MUCHOS LIENZOS BLANCOS EN MI VIDA.

    SALUDOS Y MUCHO GUSTO D LEERTE D NUEVO, TUS LETRAS M HACEN BIEN, T EXTRAÑO Y QUIERO SABER D TI, SABERTE FELIZ.

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  2. " Esa apabullante sensación al estar frente al lienzo en blanco... "

    Tatuaste mi piel.
    Con tu permiso, me quedo

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